viernes, 30 de octubre de 2015

Fumando espero...

Dicen que “la ley pareja no es dura” y esa es, probablemente, una de las falacias con las que convivimos normalmente y aceptamos así sin más. Lo absurdo de esta sentencia se puede apreciar fácilmente con la antigua ley medioeval “derecho de pernada”, que no era otra cosa que el derecho del señor del feudo de tener sexo con las casaderas antes que el marido. Era pareja, se aplicaba a todos, pero claramente era durísima y ciertamente no justa. Hoy día, en nuestro hermoso país de jauja, hay un comité que sesiona en Valparaíso que genera leyes a veces muy populares pero que son ciertamente injustas, que conculcan los derechos de muchos y que además no cumplen con el objetivo que pretendía lograr. Ayer, almorzando con Francisco en Algarrobo, en una terraza amplia al aire libre, en un hermoso día de sol, estos dos viejos cincuentones no pudieron agregarle el placer de un cigarrito pues había un lote de cabros chicos cerca. Siendo realistas, supongo que la ley persigue que los pulmones vírgenes de esos niñitos permanezcan en igual condición for ever y, por tanto, no se pueden someter a ambientes saturados de humo. Ahora, en un ambiente ampliamente aireado me imagino que el propósito debe ser el que no vean a nadie fumar, por el mal ejemplo que ello representaría a esas mentes vírgenes. Sin embargo, los mismos cabros son sometidos al ejemplo del libre consumo de alcohol de sus padres y comensales sin objeción de nadie. Comen platos gigantes de papas fritas que dañan realmente sus hígados, pero nadie objeta nada. Se van posteriormente con sus padres que saben no deben conducir con alcohol en la sangre, demostrándole a sus hijos cuan poco vale la ley para ellos. Pero fumar… noooo, por ningún motivo. Por qué demonios no habrán almorzado adentro.
La marihuana es consumida fundamentalmente vía humo, es decir, fumándola. Pero no es nociva para la salud, no le hace nada nada a los pulmones... sólo mata algunas neuronas… qué bueno que tenemos hartas. Pero los adalides de la salud, los que andan generando leyes protectoras de la salud de todos, tienen esta bandera de lucha política. Ellos están en la verdad, ellos te harán la vida difícil en función del bien común (como ellos entienden el bien común) conculcando la libertad de la ciudadanía de tomar sus propias decisiones. Además, el Estado lucra grandemente con este vicio, gran parte del valor de paquete de cigarrillos es impuesto y el consumo no disminuye, por lo cual son ingresos sustanciosos pero que no necesariamente van directamente a fondos para tratar las enfermedades que se generan por el fumar…y probablemente se dediquen a otros laudables fines como financiar viáticos y viajes al extranjero de los circenses de Valparaíso o para pagar sus modestas dietas.
Seamos claros, no digo que el cigarrillo sea bueno, no digo que el alcohol sea malo necesariamente, no digo que las frituras sean lo peor… digo que hay y existe un derecho primario que es la libertad.
Y ahora me voy a fumar un pucho, mierda!